OJOS EN TINIEBLAS (Cuento) - Un Poco de Historia

CAPITULO II - UN POCO DE HISTORIA

     En el año 2,786 el hombre consiguió por fin los medios que le permitirían viajar por el Hiperespacio se rompió así la última gran barrera que los limitaba a su pequeño e insignificante sistema solar, el cual desde el 2,300 estaba envuelto en una serie de conflictos por territorio, por la alta densidad de la población en todos los planetas y estaciones espaciales dispersadas en él.

     Viajar de un planeta a otro era un infierno, de la Tierra a Marte, el planeta más cercano y con el que se mantenía mejores relaciones diplomáticas demoraba casi 10 días, la Luna no la mencionamos pues se había vuelto inhabitable desde que la usaron como blanco de ensayo de pruebas de reactores fotonicos-nucleares en la Guerra de Ñaupas, total no había mucho que perder la Luna era solo un gran Reclusorio para prisioneros políticos y su vida no valía gran cosa ni en la Tierra ni en ningún planeta. Viajar a Urano, Neptuno, Plutón, Poseidón o peor aún a Hadez, el último de los 11 planetas no demoraba menos de 20 meses.

     Viendo así la situación era de esperarse el júbilo con el que la humanidad recibió la noticia de poder al fin viajar de un planeta a otro en cuestión de segundos, la Galaxia se abriría al fin para los Humanos, cosa que solamente estaba reservado para los Gaminidianos, los Alfa Centaurinos, u otros seres con los cuales el hombre ya tenía contacto desde el año 2,189, el año del Contacto, el año que significó también la debacle de las religiones en la Tierra.

     ¿Con qué dogmas responder a los conocimientos de seres del espacio? ¿Cómo clasificarlos serian también hijos de Dios, de Alá, de Buda? ¿Tendrían ellos que ser enseñados en las religiones terrestres o ellos vendrían e impondrían la suya a sangre y fuego como lo hacían los hombres? No había respuestas, y si las hubiera habido nadie las hubiera escuchado, la Iglesia Católica la más poderosa e influyente en la Tierra se vino abajo y con ella todas las demás incapaces de responder a un cambio tan radical como el que estaban experimentando.

     Ellos los seres del espacio proporcionaron al hombre los medios de colonizar su sistema Solar, pero manteniéndolos encerrados aun en él. El secreto del viaje por el Hiperespacio no les fue otorgado a los Hombres. Quizá temían, y con razón, a la desmedida ambición de poder de los Humanos,  y si estos hubieran poseído tal secreto que los hubiera detenido de atacar y tratar de controlar todo este sector de la galaxia, si tal como estaba basada su sociedad ellos se creían el centro y el único fin del universo, ¿no se considerarían con derecho de colonizar a seres cuyas costumbres podían parecerles salvajes a ellos? ¿Como juzgarían los Terrestres a los Alfa Centurinos por su costumbre de decapitar a los ancianos a la edad de 720 años?, ¿y qué decir de los Arcanos y su costumbre de obligar a sus hijos a pelear a muerte entre sí en sus juegos de niños?

     Por eso es que la Alianza Galactica, formada por los siguientes estados:

Alfa Centauro (el más poderoso económicamente), Arcania (el de mayor poderío bélico), Ganimedes, Zoemebuch, Deifón, Forbo, Psycho y el recién admitido Solar, nombre oficial que se le dio al sistema al que pertenecía la Tierra, mantuvo a este último como una especie de colonia con derechos especiales, mantenía su autonomía pero siempre confinados a no salir de su sistema sin un control especial.

     Por eso cuando los Humanos lograron apoderarse del secreto del viaje por el Hiperespacio la preocupación se apoderó de toda la Alianza y no fue para menos, los Humanos al verse al fin con poder decidieron tomar venganza por el confinamiento al que estuvieron sometidos se aliaron con Psycho, Deifón, Forbo y Zoemebuch que tampoco tenían mucha influencia y declararon la guerra a los estados dominantes.

     En poco tiempo estalló el conflicto para ser más exactos el año 2,998, al principio la fulminante avanzada de los Humanos y de los Psychonianos principalmente tomo por sorpresa a la Alianza que se vio obligada a retroceder pese a la feroz resistencia de parte de los Arcanos en las Batallas de GPG-123, Sunna y Fenris donde el General arcano Klifrec IV estrello su nave contra el reactor del planeta Excel destruyéndolo antes de verlo en manos de los atacantes.

     Para el año 3,183 la Guerra parecía ya tener un vencedor fijo. La Alianza resquebrajada por los ataques del Nuevo Orden, nombre que tomaron los estados desertores, y por los innumerables levantamientos de planetas en su interior animados con la idea de recuperar su autonomía, tomó la decisión de deponer las armas y aceptar la rendición incondicional, el único estado que se opuso fue Arcania, exigida por el Nuevo Orden. Arcania fue derrotada finalmente para el año 3,200.

     El Nuevo Orden mantuvo el control de los todos los estados de una manera estricta y sin ninguna clase de consideración, toques de queda, ejecuciones a los líderes de las sublevaciones contra el Concejo, control en la educación, religión y costumbres de los planetas, mantuvieron las cosas en control salvo una que otra revuelta de gran tamaño, como la del Alfa Centaurino Eryo Guya en el 5,034, hasta el año 8,901 a ese periodo se le conoce como en los libros Humanos como la Roma del Espacio y los archivos espaciales copiaron el término aunque no sabían muy bien el origen de la comparación.

     Pero al igual que Roma este Orden cayó víctima de sus propios vicios: poderes ilimitados para el Concejo, control total del comercio, etc; degeneraron en corrupción y abuso total del poder en manos de gobernantes incapaces y preocupados mas en enriquecerse ellos mismos que en la seguridad del gobierno, esto propició que ese año estalle la Gran Revuelta al mando del Mariscal Arcano Pogras Harel, que termino destruyendo sin mucho trabajo al descuidado y ruinoso Estado del Nuevo Orden.

     Arcania tomo el control total de los estados de la antigua Alianza para el año 9,000 y redujo a la obediencia total a los gobernantes Humanos incluso llego a destruir Hadez y todo su población en señal de advertencia sobre lo que haría frente a cualquier amenaza de sublevación de cualquier estado.

     A los Humanos, Psychonianos, Forbones y de demás estados les costó sobreponerse a la catástrofe y aceptar el nuevo Imperio Arcano el cual fue depuesto por los Gaminidianos en el año 11,534 por la ascensión del Emperador Yubb Fes II. Con el establecimiento del nuevo imperio la situación para los estados insurgentes se volvió un poco más blanda, se cortó el control de armas y se devolvió la autonomía a los estados con la esperanza de regresar a la paz de los primeros siglos de la Alianza. Pero el germen de la venganza y el rencor ya estaba maduro en los Humanos y estos al ver la oportunidad se levantaron en armas al mando del General Neil Vargas el año 11,887 pero el Imperio no estaba dispuesto a una nueva falta de respeto y después de infructuosos intentos de conciliación tomo la decisión de encargar a Arcania la misión de reducir a los rebeldes a la obediencia total, así el año 11,889 se produjo el Bombardeo al Sistema Solar.

     Este fue terrible, Poseidón y Plutón quedaron completamente inhabitables, 5 satélites de Saturno fueron barridos de la Galaxia, pero fue la Tierra la que sufrió el peor daño, los Arcanos no querían exterminar a los humanos sino humillarlos hacerlos sentir como gusanos encerrados en sus túneles y eso fue lo que hicieron. Soltaron unas nuevas bombas genéticas que atacaban la retina del ojo humano, sin dañar ninguna otra cosa, haciéndolo 1'000,000 veces más sensible a la luz del Sol, el resultado, la Humanidad quedo completamente ciega, no podían abrir sus ojos, la más pequeña luz era un destello luminoso incandescente, quemante, hiriente, imposible de mirar, los pocos humanos, no afectados, hubieron de refugiarse en túneles subterráneos junto a los afectados, pues con el 93% de la población ciega y un 4% muertos era imposible defenderse de los bombardeos Arcanos.

     En los Túneles, como los llamaron estaban prohibidas todas las luces, pues lo pocos humanos que no habían quemando sus pupilas intentando abrir los ojos, podían sentir los destellos luminosos, insoportables y quemantes de la más débil luz aun con los ojos cerrados. Los humanos sanos, no podían abandonar los túneles pues los arcanos seguían bombardeando el planeta cada cierto tiempo con bombas no solo genéticas sino de gases radiactivos, eso sí sin destruir ningún edificio ni obra de arte, eran un estado civilizado después de todo, querían estar seguros que no quedara ningún humano sano, estos pocos hubieron de fabricar Radares especiales a los que llamaron Observadores que sirvieran de ojos a todo un planeta que vivía en las más completas tinieblas a más de 20 Kilómetros bajo tierra.

     Los hijos de los humanos que nacieron en los túneles, eran completamente sanos y la única esperanza de salvación de su especie, pero los Arcanos lograron introducir una nueva bacteria genética en el agua de los Túneles y así estos recién nacidos irían naciendo cada vez con los ojos más débiles, rápidamente con el correr del tiempo para la 15ava generación a la que pertenecía Beric los ojos eran casi inservibles solo podían percibir luz 800,000 veces más fuerte que la que hubiera sido necesaria para estimular un ojo humano sano, tuvieron que depender de Guías empotrados en el cráneo una especie de radar y detector de calor para poder movilizarse y aprender usarlos, no podían usar producir ningún tipo de luz pues para que ellos pudieran ver hubiera tenido esta que ser tan fuerte que el calor los hubiera consumido además de ser un fácil blanco para los Arcanos. Lo único que salvó a la Tierra de no ser invadida totalmente fue su alto nivel de radiación, al cual eran extremadamente sensible los Arcanos y demás seres del espacio, así que estos se aseguraron que no habría ninguna nueva sublevación, bombardeando regularmente el planeta en su superficie, total Solar ya no pertenecía a la Alianza, fue considerado un Estado desertor sin ningún tipo de derecho.

     Pero ese no fue todo el calvario que hubo de pasar la raza humana, tuvieron que organizarse socialmente encerrados en el fondo de la tierra, esto produjo guerras civiles extremadamente sangrientas, el hombre no era capaz de ver la sangre y el horror del exterminio, mataba sin conciencia real de lo que hacia fueron 300 años de reconstrucción total del planeta, 300 años del más horrible sufrimiento, sufrimiento con el que ahora Beric quería terminar, si él tenía la cura para la ceguera.